El servei d’ambulàncies del Vallès farà vaga per demanar la readmissió de vuit treballadores

La plantilla de treballadores de UTE Falck-Ambulàncies Vallès ha convocat quatre dies de vaga per aconseguir la readmissió de vuit treballadores acomiadades per l’empresa concessionària del servei d’ambulàncies de la nostra comarca.

Imatge: .flickr

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L’acomiadament, el passat dilluns, de vuit treballadors de la plantilla de la UTE Falck-Ambulàncies Vallès ha sigut l’espurna que ha encès la flama, i és per aquest motiu que la plantilla ha decidit, en una assemblea celebrada el dimarts, convocar una vaga de quatre dies entre l’onze i el catorze de febrer.

El comitè, que es va reunir amb la direcció de l’empresa sense aconseguir que aquesta fes un pas enrere, considera una “caixa de bruixes” i una “agressió injustificada de l’empresa” l’acomiadament de les vuit treballadores.

Falk, l’empresa danesa que controla el servei d’ambulàncies del Vallès

El passat set d’abril el Departament de Salut va adjudicar definitivament la gestió de les ambulàncies del Vallès Occidental – per un període de deu anys – a l’empresa danesa Falck. Tres mesos abans, la mateixa empresa havia estat la gran guanyadora de les adjudicacions del servei d’ambulàncies a Catalunya, però Salud va reformular l’adjudicació del concurs i va repartir més «el pastís». A continuació, copiem una notícia de «El Triangle», que fa una radiografia de l’empresa.

Falck es una multinacional danesa, un monstruo en el sector de los servicios de seguridad, bomberos y de ambulancias que se está comiendo los concursos públicos de la Generalitat con tanta voracidad que levanta muchas sospechas: no sólo por parte de las empresas de la competencia, que están perdiendo las concesiones, sino también en la Fiscalía de Barcelona, que investiga las adjudicaciones de los servicios de bomberos de los aeropuertos de Reus, Alguaire y la Seu; así como en el Juzgado de Instrucción número 3 de Reus, que indaga, en una pieza separada del caso Innova, sobre el concurso del servicio de ambulancias públicas, del que Falck ha sido la gran ganadora. Pero si la multinacional danesa levanta sospechas por la forma en la que se impone en las licitaciones públicas, también levantan los departamentos de la Generalitat que convocan estos concursos, empezando por el del consejero Boi Ruiz.

Una rama del caso Innova

El juez Diego Álvarez de Juan, titular del Juzgado de Instrucción número 3 de Reus, abrió hace un año una pieza separada del caso Innova para investigar los movimientos empresariales en torno al concurso del servicio de transporte sanitario de Catalunya convocado por el departamento de Salud. Se trata de la licitación más grande de la legislatura, dotada con 2.130 millones de euros por los próximos diez años. Cuando hace unos días se abrieron las plicas económicas, Falck presentó las mejores ofertas en 6 de los 13 lotes con los que la Generalitat ha dividido el pastel de las ambulancias públicas de Catalunya.

A raíz de los resultados de este concurso, aún pendiente de revisión, se ha despertado en círculos políticos y empresariales el interés por la pieza separada -la número 7- del caso Innova sobre el sector de las ambulancias, que tiene su origen en la documentación incautada por la Guardia Civil en el domicilio particular de Josep Prat, ex director general del grupo de empresas Innova y ex presidente del Instituto Catalán de la Salud (ICS) hasta 2012, un cargo este último al que llegó por decisión del consejero Boi Ruiz.

En el registro que se efectuó en casa de José Prat en febrero de 2013, los agentes encontraron documentos donde se perfilaba parte de un futurible mapa del transporte sanitario de Catalunya, con una anotación manuscrita en la que se lee “los daneses” como gestores del servicio de ambulancias del Vallès Occidental y del Oriental, comarcas en las que, precisamente, se han impuesto los daneses de Falck en el concurso que ha convocado el departamento de Salud dos años después. También hay una anotación manuscrita en la que se lee “Bonomi”, que es el apellido de la familia que controla el fondo de inversión Investindustrial, propietario de Transport Sanitari de Catalunya (TSC), que se ha impuesto en solitario o mediante uniones temporales de empresas (UTE) en 4 de los 13 lotes del concurso.

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