El nacimiento del Compromís
El sábado 27 de febrero se presentaba en el Casal Popular i Cultural La Clau el Compromís per Cerdanyola. Este movimiento político nace con la voluntad de articular una candidatura amplia de la izquierda transformadora para las elecciones municipales de 2011, la presentación a que nos referimos no era más que el punto de arranque para ella y no debería ser entendida como el punto de llegada.
Creo necesaria esta precisión por cuanto la organización que con ese acto presentábamos ante el pueblo de Cerdanyola ha sido el resultado de copiosos debates entre personas que teníamos diversa procedencia política y modos diferentes de organizarnos para la discusión y la acción. De este proceso ha podido generarse la imagen errada de que el compromís es un simple acuerdo entre dichas personas para presentar una candidatura de izquierda unitaria en Cerdanyola. Y no es así.
El objetivo del Compromís es constituir una plataforma abierta a toda la gente de izquierdas consecuente, en la acepción más amplia de dicha ideología para abrir las estructuras de poder municipal a la participación popular, cerradas hasta ahora por el fracaso político y organizativo de los partidos de izquierda que alguna vez proclamaron como suyos dichos objetivos. Dicho fracaso puede parecer un éxito para los dirigentes de dichos partidos que han ido sucediéndose en el poder, no obstante, no debemos llevarnos a engaño y todos los que hemos formado parte de dichas organizaciones debemos entenderlo como un fracaso colectivo en el que tuvimos parte mayor o menor según el caso. Así las cosas, el acto de presentación del sábado no debe verse como un punto de llegada sino de salida. Un punto de salida para gobernar la ciudad desde la izquierda popular.
Si bien es cierto que el impulso inicial ha sido protagonizado (muy posiblemente de forma excesiva) por personas que ya estábamos en organizaciones políticas o que ya provenían de dicha cultura, ello no debe verse como un acto excluyente ni debe creer nadie, ni de los que hemos asumido ese papel ni de los que no, que estamos por encima de cualquier otra aportación. Creer esto sería incompatible con la voluntad que siempre hemos expresado de que una candidatura amplia y unitaria eclosionara en Cerdanyola. Entiéndase, sin embargo, que las personas que hemos hecho este papel teníamos una trayectoria pasada que, de una forma o de otra… Nos obligaba a buscar un acuerdo. Para algunos era nuestra obligación ante la gente que ahora o antes nos ha mostrado su confianza. Espero que lo hayamos hecho más o menos bien. Y a partir de aquí, no olvidemos que compañeros somos todos.
Jorge Haro.