[Entrevista] “Los médicos que tratan a pacientes con VIH tendrían que tener una buena formación en el manejo de la patología psiquiátrica”
La depresión y la ansiedad son los trastornos mentales que mas prevalecen en pacientes con VIH. ¿Han aumentado los trastornos mentales asociados al VIH? ¿Cuáles son las causas de la asociación entre patología mental y VIH? ¿Cómo debe abordarse la problemática de estos pacientes? Juan Fernández, estudiante de periodismo y vecino de Cerdanyola, aborda estas preguntas mediante una entrevista a Jordi Blanch Andreu, médico especialista en Psiquiatría, Presidente de la Sociedad Catalana de Psiquiatría y Salud Mental y Jefe de la Unidad de Salud Mental de personas con VIH en el Hospital Clínic.
Desde la aparición a mediados de los años noventa de la terapia antirretroviral de alta eficacia, el VIH se ha convertido en una enfermedad crónica en los países desarrollados. La tasa de mortalidad ha disminuido de forma espectacular. Según la última guía de Junio de 2015, elaborada por ONUSIDA, 15,8 millones de personas tienen acceso al tratamiento antirretrovírico; lo que representa el 40% de los infectados por el VIH en el mundo. La cronificación de la enfermedad; ha dado paso a la aparición de patologías psiquiátricas en pacientes portadores del VIH.
¿Han aumentado los trastornos mentales asociados al VIH?
¿Cuáles son las causas de la asociación entre patología mental y VIH?
¿Cómo debe abordarse la problemática de estos pacientes?
El primer documento de consenso en España sobre alteraciones psiquiátricas y psicológicas en pacientes con VIH, elaborado en 2015 por Gesida, junto con la Secretaría Nacional sobre el SIDA, La Sociedad Española de Psiquiatría y la Sociedad Española de Infectología Pediátrica, tiene como objetivo; poner al alcance de todos, recomendaciones sobre estrategias de tratamiento en este contexto.
¿Se ha medido un incremento de patología mental asociado al VIH?
Últimamente, la gente consulta más, se diagnostican más patologías mentales relacionades con el VIH que antes. Aunque la prevalencia siempre ha sido muy alta.
¿Cuáles son las causas por las que la asociación entre patología mental y VIH es tan elevada?
Hay varias causas principales que pueden explicar esta asociación. La primera es que el virus afecta al sistema nervioso, ya que éste, se esconde en el cerebro. Después, están los pacientes con enfermedades mentales de fácil diagnóstico, como la esquizofrenia o el
trastorno Bipolar, que son más vulnerables a infectarse; ya que tienen más conductas de riesgo. Lo mismo ocurre con personas que consumen sustancias, tienen más riesgo de infectarse porque no controlan bien la conducta. Otra de las causas, es el conocimiento de la enfermedad. Hay pacientes a los que el shock del diagnóstico sumado al estigma relacionado con el VIH, les produce depresión y ansiedad. También existen enfermedades relacionades con el VIH, que pueden alterar el cerebro y producir un trastorno psiquiátrico. Por último, algunos tratamientos para el VIH pueden provocar efectos neuropsiquiátricos en el paciente.
Diagnosticar una patología psiquiátrica relacionada con el VIH no es tarea fácil…
No, porque a diferencia de otras especialidades médicas, para saber si una persona tiene una enfermedad mental hay que interrogarle. El paciente tiene que saber contar lo que le pasa y el profesional tiene que saber preguntar. Si una de las dos partes falla, es difícil hacer un diagnóstico certero. La única manera de diagnosticar una enfermedad mental es a través de la entrevista clínica. A diferencia de otras enfermedades, en las que se puede hacer una radiografía, un scanner o una analítica; en Psiquiatría no hay ninguna prueba, excepto la de entrevistar al paciente. Es importante que el psiquiatra sepa preguntar bien y que el paciente sepa explicarse, con el fin de realizar un buen diagnóstico.
¿Qué trastorno mental asociado al VIH se diagnostica con más frecuencia?
Lo más frecuente es la depresión. También vemos a muchas personas con ansiedad, que puede estar relacionada o no con el hecho de ser seropositivas. Es habitual también, ver a personas con problemas psiquiátricos por consumo de sustancias tóxicas.
Uno de los principales objetivos del Primer Documento de Consenso Nacional sobre alteraciones psiquiátricas y psicológicas en pacientes con VIH es ofrecer herramientas a médicos de diferentes especialidades para que puedan diagnosticar y preescribir tratamiento a los pacientes. ¿Deberían crearse unidades específicas para abordar de forma integral a estos pacientes, en las cuáles exista una coordinación entre Médicos de diferentes Especialidades y no solamente entre psiquiatras y psicólogos? ¿Cree que es factible la puesta en prática de lo propuesto en el documento?
Sí, lo ideal sería que hubieran unidades especiales multiprofesionales. Para ello, el Sistema de Sanidad Público, necesitaría muchos recursos económicos; que debido a los recortes, no tiene.
Como mínimo, ya que no las tenemos, por falta de recursos económicos, los médicos que tratan a pacientes con VIH, tendrían que tener una buena formación en el manejo de la patología psiquiátrica; como mínimo, de la que se puede manejar, a nivel de atención primaria, como es la depresión y la ansiedad.
Estos médicos internistas e infectólogos, que tratan a personas con VIH, tendrían que tener una formación regular de como se diagnostica y como se trata una depresión y un trastorno de ansiedad; que es lo que propone el documento. El objetivo, es que los pacientes no tengan que ir al psiquiatra para ser diagnosticados. De esta manera, se haría un diagnóstico precoz, que evitaría problemas mayores. Si el infectólogo o internista, tiene dudas sobre si la depresión tiene relación o no con el VIH, en ese caso, si puede consultar con un psiquiatra experto en VIH. Pero lo importante, es que el médico la diagnostique. Si el paciente seropositivo, tiene una patología mental más compleja, como es la esquizofrenia, entonces si se podría derivar a unidades psiquiátricas más especializadas.
El deterioro cognitivo asociado al VIH, es otro de los problemas a los que se enfrenta el paciente. ¿Qué pruebas se realizan para diagnosticar un deterioro cognitivo?
Para hacer un buen diagnóstico, hay que realizar una exploración neuropsicológica en profundidad, que consiste en un test muy elaborado. Para sospechar si una persona tiene un deterioro cognitivo de carácter leve, no es necesaria esta gran exploración, basta con hacer dos o tres preguntas muy sencillas y es muy fácil detectarlo. Se realizan preguntas al paciente sobre si se despista mucho últimamente, si tiene fallos de memoria, si tiene falta de concentración… Con esas preguntas es suficiente para detectar un deterioro cognitivo de carácter leve.
¿Qué factores relacionados con el VIH favorecen el deterioro cognitivo?
Hay factores que dependen del VIH y otros factores que dependen de la persona, como el nivel cultural, la edad, el consumo de drogas…
Los factores que dependen del VIH son el tiempo de evolución del virus, si el paciente lo trató enseguida, si estuvo mucho tiempo inmunodeprimido o no, el tipo de virus, el tipo de tramiento que esté tomando la persona…Todos estos factores influyen en el daño neurocognitivo.
El peor de los casos sería la demencia asociada al VIH…
Actualmente, es raro ver demencia relacionada con el virus. Lo más prevalente son formas más leves de deterioro, que pueden pasar desapercibidas por el entorno del afectado. Estas alteraciones leves pueden ser debidas al VIH, aunque en otras personas pueden ser debidas al estrés.
Dr Blanch ¿Cómo cree que será el futuro de estos trastornos neurocognitivos, teniendo en cuenta que los tratamientos actuales son más eficaces y de menor toxicidad y además, se inicia el tratamiento antiretroviral desde el principio del diagnóstico. ¿Cree que la prevalencia de estos procesos irá en aumento, se mantendrá o se reducirá con el tiempo?
A pesar de los tratamientos, y a pesar de que se traten de forma precoz, no deja de haber siempre una reacción del organismo contra el virus. Mientras no erradiquemos el virus del organismo, la persona, pese al tratamiento, estará luchando contra el virus, en forma de reacción inflamatoria. Esa inflamación puede afectar a muchos órganos entre ellos, el cerebro, en forma de pequeña encefalitis crónica; lo que puede producir un desgaste en el sistema nervioso en el cerebro y dar problemas a largo plazo, de memoria, atención,concentración…Hoy por hoy, no hay medicamentos para reducir la inflamación que produce el virus.